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Francesco, uno de los 27 nuevos reclutas que prestará juramento este sábado 4 de octubre. Francesco, uno de los 27 nuevos reclutas que prestará juramento este sábado 4 de octubre.

“Un evento como una boda”: 27 nuevos Guardias Suizas juran fidelidad al Papa

Este sábado será finalmente el día tan esperado: 27 jóvenes prestarán juramento en una solemne ceremonia en el Patio de San Dámaso del Palacio Apostólico, prometiendo fidelidad al Papa León XIV. La ceremonia, que tradicionalmente se celebra cada 6 de mayo, fue aplazada debido a la muerte del Papa Francisco y a la elección de su sucesor. Ahora, el cuerpo de la Guardia Suiza, el ejército más antiguo del mundo, recibe oficialmente a sus nuevas reclutas.

Mario Galgano – Ciudad del Vaticano

Para la ocasión, el uniforme de gala de las Guardias luce impecable: cuello y guantes blancos, la hebilla del cinturón con las iniciales entrelazadas del cuerpo brilla, y ni una mota de polvo empaña los tejidos renacentistas en rojo, amarillo y azul. Con orgullo, Jan, de 21 años, originario de Engelberg, en el cantón de Obwaldo, se presenta en el patio del cuartel.
«Servir al Papa es un gran honor y una gran responsabilidad», afirma. «Nos enorgullece que, desde hace 500 años, seamos nosotros, los suizos, quienes protegemos al Papa. Nosotros, y nadie más».

Tras terminar la escuela abacial de Engelberg, Jan eligió la carrera militar. «Durante el servicio militar descubrí que me gustaban la disciplina y la precisión», cuenta. «Todo empieza por la mañana, cuando nos ponemos el uniforme: debe estar perfecto. Aprendí que comenzar el día con orden y limpieza es esencial».

Un amigo lo animó a considerar la Guardia Suiza. Católico y con buen dominio del italiano, Jan reunió los documentos necesarios —desde la carta de recomendación del párroco hasta el certificado de antecedentes penales— y superó las entrevistas con el comandante Christoph Graf y el capellán P. Kolumban Reichlin.

Uno de los momentos que más lo marcó fue la despedida del Papa Francisco:
«Tuve el honor de hacer guardia junto a su féretro. Fue uno de los momentos más conmovedores de mi vida».

Ahora, en pleno Año Santo, Jan realiza turnos de hasta doce horas diarias, incluso durante audiencias extraordinarias y encuentros con jefes de Estado. Sobre el nuevo Papa comenta:
«León XIV es mucho más reservado que Francisco. No es de conversar, pero siempre da las gracias y valora nuestro trabajo. Y eso es lo que más importa».

También Francesco, natural de Bellinzona, ha cumplido un sueño de infancia. «Mi padrino Antonio me transmitió su pasión por la Guardia. De niño me regalaba cosas relacionadas con ella. Luego, en 2013, cuando eligieron a Francisco, yo estaba en la plaza de San Pedro y solo tenía once años. Me impresionó que el nuevo Papa se llamara como yo».


Después de visitar la caserna, no tuvo más dudas: «El 31 de mayo de 2024 finalmente coroné mi sueño».

Hoy Francesco vive su servicio con entusiasmo:
«El encuentro con peregrinos de todo el mundo enriquece mi fe. Los días de la muerte de Francisco y del cónclave fueron intensísimos. Estaba de guardia cuando se anunció el Habemus Papam: jamás olvidaré el eco de los gritos de la multitud».

Gerlando, del Malcantón ticinense, describe Roma como «una ciudad maravillosa, donde siempre hay algo nuevo por descubrir». También él vive el Año Santo como una oportunidad única: «Es un honor servir durante el Jubileo. Conocemos peregrinos de todo el mundo y hablamos con ellos en distintos idiomas».

Haber participado en el cónclave, añade, «fue inolvidable: ver reunidos a todos los cardenales y vivir aquellos días vestido con el uniforme completo fue algo muy especial».

Los tres jóvenes se preparan intensamente para el juramento, tanto espiritualmente, junto al capellán, como de forma práctica, ensayando con la armadura. Para Jan será «un evento como una boda: algo que se hace una sola vez, delante de todos. Hoy en día los jóvenes juran con facilidad, pero para nosotros tiene un significado inmenso».

Unas 4.000 personas asistirán este sábado cuando las 27 nuevas reclutas pronuncien la fórmula frente a la bandera:

«Juro servir fiel, leal y honorablemente al Sumo Pontífice reinante, León XIV, y a sus legítimos sucesores, comprometiéndome con todas mis fuerzas por ellos, dispuesto, si fuera necesario, a dar mi vida en su defensa».

Con estas palabras, los recién llegados entrarán a formar parte de la historia de la Guardia, fundada en 1506, que aún hoy vive su lema:
«Una vez guardia, guardia para siempre».


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03 octubre 2025, 14:17