Empresas que apoyan a la familia: la Guía de Buenas Prácticas del IAE

Patricia Ynestroza - Vatican News

Desde hace más de una década, un grupo creciente de empresas en Argentina y América Latina viene demostrando que es posible integrar el mundo del trabajo con las necesidades reales de las familias. Ese compromiso se refleja en la Guía de Buenas Prácticas, una publicación bianual impulsada desde el IAE Escuela de Negocios de la Universidad Austral, que recoge políticas, beneficios e iniciativas concretas orientadas a acompañar a los colaboradores en sus responsabilidades familiares. En entrevista a la directora del Centro Conciliación Familia y Empresa del IAE, Patricia Debeljuh dijo a Vatican News que se trata de construir un mundo del trabajo que reconozca que detrás de cada colaborador hay una familia, y que acompañarla es también una forma concreta de contribuir al bien común.

Un proyecto con trayectoria

El trabajo comenzó en el año 2009 y, desde 2011, cada dos años se publica una nueva guía. La edición más reciente —presentada en Buenos Aires a fines de octubre— corresponde a la octava guía de Argentina y a la novena si se suma el trabajo realizado junto a empresas de El Salvador. Esta última edición, identificada por su característico color fucsia, reúne el aprendizaje y las experiencias de los últimos dos años.

A lo largo del tiempo, la guía se consolidó como un espacio de referencia para visibilizar buenas prácticas empresariales que ponen a la familia del colaborador en el centro de las decisiones organizacionales.

Alcance regional y diversidad de empresas

En esta edición participan empresas argentinas de todos los tamaños y sectores, no solo radicadas en Buenos Aires, sino también en distintas provincias del interior del país. Además, el proyecto amplía su mirada regional incorporando cinco buenas prácticas provenientes de otros países de América Latina: Uruguay, México, El Salvador, República Dominicana y Perú.

Esta diversidad demuestra que el compromiso con la familia trasciende fronteras y contextos económicos, y que puede adaptarse a realidades empresariales muy distintas.

La familia como nuevo stakeholder

El objetivo central de este trabajo es claro: apoyar a las familias desde el mundo del trabajo. Para ello, la guía busca sensibilizar y concientizar a líderes, empresarios y tomadores de decisión sobre un cambio de paradigma clave: la familia del colaborador es un nuevo stakeholder de la empresa.

Cada publicación presenta políticas y beneficios que responden a demandas familiares concretas, mostrando que el acompañamiento no solo es posible, sino también beneficioso para las personas y para las organizaciones.

Buenas prácticas que marcan la diferencia

La guía reúne ejemplos inspiradores de empresas que ya están recorriendo este camino. Entre ellos se destacan: Sanofi, con políticas de acompañamiento a la paternidad y la maternidad que incluyen seis meses de licencia paga para madres y padres, seguidos de un regreso progresivo al trabajo. Este esquema permite reducir gradualmente la carga horaria mensual, favoreciendo el cuidado del bebé y, en particular, la continuidad de la lactancia materna. La misma empresa también presenta iniciativas para acompañar a colaboradores que atraviesan enfermedades como el cáncer u otras patologías crónicas, brindando apoyo y beneficios que les permiten transitar la enfermedad sin sentirse abrumados por las exigencias laborales; Siemens comparte prácticas orientadas a acompañar a padres y madres de hijos con discapacidad, ofreciendo apoyo específico frente a estas realidades familiares; Naranja X presenta iniciativas vinculadas al cuidado de la salud mental de los empleados y sus familias; Sancor Seguros impulsa el programa Mi primer empleo, destinado a hijos de empleados, facilitando su inserción laboral y fortaleciendo el vínculo entre familia y empresa. 

Hacia una cultura empresarial más humana

Estas experiencias muestran que las empresas pueden desempeñar un rol clave en el fortalecimiento de las familias, generando culturas organizacionales más humanas, inclusivas y sostenibles. La Guía de Buenas Prácticas no solo documenta lo que ya se está haciendo, sino que invita a otras organizaciones a sumarse y a repensar su impacto más allá de los resultados económicos.

Presentación de la novena guía de buenas prácticas